1. Cuando comer juntos ya no es agradable.
Si esas comidas o cenas que antes hacías con él, ya no existen y ahora las comidas son aburridas, donde ni las palabras están presentes.
Por eso, lo que sucede y se afirma en una mesa, puede decir mucho de una relación.
2. Empiezas a dejar de preocuparte si está bien o donde está, sin darte cuenta.
Esto no significa ser una mala persona, solo te ha dejado de preocupar donde está o saber lo que hace, donde simplemente dejó de ser importante para ti, y empiezas a pensar más en ti, en tus hijos u otras personas.
3. Cuando le dices adiós no sientes especialmente nada.
Si hay momentos en los que se marcha por días donde dejas de verlo por cualquier situación y solo al despedirte, piensas… ¡Qué bien!… se ha ido unos días.
4. Cuando siente que tu pareja ya no es el protagonista y que ni siquiera aparece en tus pensamientos.
Esto es algo realmente triste cuando sientes que ya ese hombre no aparece como parte de tu futuro, donde incluso hasta te visualizas sin él y sientes qué es lo mejor.
5. Si sientes que al despertar ya no lo miras y piensas “solo es un día más”.
Cuando siente amor siempre te alegra despertar junto a él; lo miras, le das un beso y le das los buenos días, siendo un día más de amor en sus vidas juntos.
6. Si cuando él no está en casa, sientes que no lo extrañas y prefieres estar mejor sola.
Cuando olvidas que él no está e incluso llegarás a pensar en un instante” Ahora va a llegar”, y sientes en ese momento que eso suceda, el cuál prefieres seguir en calma y en soledad.
7. Te das cuenta de que cuando estás disfrutando, él no está cerca de ti.
Cuando sientes que tu vida simplemente está buscando otros caminos, donde comienzas a ser feliz y a sonreír. Y piensas cuando él no participa en ello “Yo podría ser feliz sin él”.
8. Cuando empiezas a proyectar un nuevo amor.
Si sientes nuevas ilusiones con alguna otra persona que quizás hayas conocido, o sencillamente ya te imaginas con alguien más, donde sientes nuevamente el amor y comienzas a sonreír de felicidad.